Diana Vreeland - Principios de siglo en Paris II

Las siluetas era completamente nuevas. Casi de la noche a la mañana, las siluetas embutidas y encorsetadas de la época Victoriana desaparecieron.  Poiret era el diseñador de este cambio de moda, de “La belle epoque” con sus preciosas mujeres con grandes ojos y duros corsés. Las mujeres ahora tenían cintura y pechos y supongo que también tendrían estomago y todo lo demás. Pero Poiret lo cambió todo. El corsé desapareció. En lugar de curvas había una línea recta. Parecía que todo el mundo se había estilizado de la cabeza a los pies. La naturalidad de los cuerpos las mujeres era lo realmente nuevo. Pero a veces sus faldas eran tan estrechas que apenas podían andar. Aún las recuerdo balancearse con sus enormes sombreros adornados con pájaros exóticos, escarapelas y airones, caminando por el Bois con pequeños pasos remilgados ...
¡Sus zapatos eran tan bonitos! Los niños por supuesto, se fijan muchísimo en los zapatos. Están más cerca de ellos. Recuerdo los zapatos de hebilla del estilo del siglo XVIII, mejor tallados que un diamante. Me encantan los adornos en los zapatos. A mi modo de ver, es como los zapatos deben ser.

1 comentarios:

dijo...

los zapatos son joyas, porqué no adornarlos cuales joyas?